Escrito por la Dra. Mercedes Fernández-Gianotti Pisani
Imagina que estás construyendo una casa. Antes de levantar paredes y techos, necesitas asegurarte de que los cimientos sean sólidos y estables. Ahora, piensa en tus dientes como las paredes y en las encías como el terreno donde se apoyan. Si ese terreno está en mal estado, como un pantano o un suelo inestable, la casa no será segura, por más bien que construyas las paredes. Lo mismo ocurre con tus dientes: si las encías y el hueso que los sostienen no están saludables, cualquier tratamiento de ortodoncia que intente alinear tus dientes puede tener graves problemas a medio plazo.
Las enfermedades periodontales, como la gingivitis o la periodontitis, afectan directamente el soporte de tus dientes. Esto puede hacer que las raíces se debiliten, provocando movilidad dental, inflamación y, en casos graves, la pérdida de piezas dentales. Por eso, cuando se planea un tratamiento de ortodoncia, es fundamental asegurarse de que tus encías estén sanas antes de empezar.
En este artículo, exploraremos por qué es tan importante tratar y mantener la salud periodontal antes, durante y después de la ortodoncia, y cómo este cuidado puede marcar la diferencia en los resultados de tu tratamiento. ¡Vamos a descubrirlo!
La relación entre la periodoncia y la ortodoncia
¿Qué es la periodoncia?
La periodoncia es la rama de la odontología que se encarga de estudiar, prevenir y tratar las enfermedades que afectan a las encías y al hueso que soporta los dientes. Estas estructuras son como los cimientos que mantienen las piezas dentales en su lugar. Si las encías o el hueso están dañados, el soporte de los dientes se debilita, lo que puede provocar movilidad dental, inflamación crónica e incluso la pérdida de piezas dentales.
Entre las enfermedades periodontales más comunes están:
Gingivitis: Una inflamación reversible de las encías, caracterizada por enrojecimiento, sangrado y molestias.
Periodontitis: Una infección más avanzada que destruye el hueso y el tejido que sostienen los dientes, y que puede generar consecuencias permanentes si no se trata a tiempo.
¿Cómo afecta la salud periodontal a la ortodoncia?
La ortodoncia, al mover los dientes para corregir su posición, ejerce una fuerza constante sobre ellos y las estructuras que los rodean. Si las encías o el hueso tienen problemas, este movimiento puede complicar el tratamiento, provocando:
- Mayor riesgo de movilidad dental, porque el soporte óseo es insuficiente.
- Inflamación y sangrado persistentes, lo que dificulta la higiene oral durante el uso de aparatos ortodóncicos.
- Retracción de las encías, que deja las raíces expuestas y puede afectar la estética y la funcionalidad.
- En casos graves, pérdida de dientes durante o después del tratamiento ortodóncico.
Cuidado: un diagnóstico periodontal es indispensable antes de comenzar cualquier tratamiento de ortodoncia. Solo con encías sanas y un hueso estable se pueden garantizar resultados seguros y duraderos.
Beneficios de un enfoque integral en el cuidado bucodental
Abordar la salud periodontal junto con la ortodoncia tiene ventajas evidentes:
- Menos riesgos durante el tratamiento: Al cuidar tus encías, se reducen las probabilidades de complicaciones como infecciones o retracción gingival.
- Resultados más duraderos: Los dientes se estabilizan mejor cuando el hueso y las encías están en óptimas condiciones.
- Higiene simplificada: Al evitar la inflamación y los problemas periodontales, la limpieza diaria es más sencilla, incluso con brackets o alineadores.

En resumen, la relación entre la periodoncia y la ortodoncia es tan estrecha como la de los cimientos de una casa y sus paredes. Tratar las encías no solo protege la salud bucodental, sino que también optimiza los resultados del tratamiento ortodóncico, brindándote una sonrisa sana y bien alineada.
La salud periodontal antes del tratamiento de ortodoncia
Antes de iniciar cualquier tratamiento de ortodoncia, es imprescindible asegurarnos de que las encías y el hueso que soportan tus dientes estén en perfecto estado.
Evaluación inicial: ¿Por qué es fundamental un diagnóstico periodontal?
Porque la ortodoncia mueve los dientes aplicando fuerza constante, y si el «terreno» que los sostiene está débil, los riesgos de complicaciones aumentan considerablemente.
Un diagnóstico periodontal inicial permite detectar problemas como inflamación, acumulación de placa bacteriana o pérdida ósea que podrían comprometer el éxito de la ortodoncia. Según estudios, hasta un 47% de los adultos presentan algún grado de enfermedad periodontal sin saberlo, y tratar estos problemas antes de comenzar la ortodoncia es clave para evitar que se agraven.
Problemas periodontales comunes que deben tratarse previamente
Antes de poner brackets o alineadores, es importante abordar cualquier signo de enfermedad periodontal. Algunos de los problemas más comunes incluyen:
Gingivitis: Encías inflamadas que sangran con facilidad. Es reversible si se trata a tiempo con una limpieza profesional y una buena rutina de higiene.
Periodontitis: Una enfermedad más avanzada que puede causar pérdida de hueso. Si no se trata, el movimiento dental durante la ortodoncia podría acelerar el deterioro.
Bolsas periodontales: Espacios entre los dientes y las encías donde se acumulan bacterias. Estas deben reducirse para evitar infecciones durante el tratamiento.
Un paciente con encías sanas tiene muchas más probabilidades de completar su ortodoncia sin complicaciones y con resultados óptimos.
Consecuencias de iniciar la ortodoncia sin tratar las encías
Comenzar un tratamiento de ortodoncia sin resolver problemas periodontales puede llevar a consecuencias graves, como:
Mayor riesgo de movilidad dental: Dientes que se aflojan por falta de soporte óseo adecuado.
Inflamación crónica: Encías constantemente inflamadas, que dificultan la higiene y generan molestias continuas.
Retracción gingival: Las encías pueden retraerse, dejando expuestas las raíces de los dientes y afectando tanto la estética como la funcionalidad.
Pérdida de dientes: En casos avanzados, los dientes podrían perderse debido al daño irreversible en las estructuras de soporte.

Consejo práctico: Antes de iniciar la ortodoncia, agenda una revisión periodontal con tu dentista o periodoncista. Una limpieza profunda y, si es necesario, tratamientos específicos como el raspado y alisado radicular (también conocido como curetaje) pueden hacer una gran diferencia.
Cuidando las encías durante la ortodoncia
Cuando llevas brackets o alineadores, tus dientes y encías requieren atención extra. Esto se debe a que los aparatos ortodóncicos dificultan la limpieza diaria, aumentando el riesgo de acumulación de placa bacteriana y, con ella, la aparición de problemas como inflamación o caries. Si además ya tienes problemas periodontales, estos pueden agravarse si no se controlan adecuadamente.
Riesgos de la ortodoncia en pacientes con problemas periodontales
Estudios muestran que hasta un 70% de los pacientes con ortodoncia experimentan algún grado de inflamación de las encías durante el tratamiento. Esto no significa que tengas que preocuparte, pero sí que necesitas ser más disciplinado con tus hábitos de cuidado bucal y seguir las indicaciones de tu dentista.
Técnicas de higiene oral específicas para portadores de brackets y alineadores
Cuidar tus encías mientras llevas ortodoncia es posible si sigues una rutina de higiene oral adaptada a tus necesidades. Aquí tienes algunos consejos:
Cepillado dental correcto: Usa un cepillo de dientes suave o uno eléctrico con cabezal pequeño que te permita llegar a todos los rincones. Cepíllate después de cada comida, asegurándote de limpiar bien entre los brackets.
Cepillos interdentales: Son imprescindibles para eliminar restos de comida y placa bacteriana en las zonas donde el cepillo normal no llega, como entre los brackets y los alambres.
Hilo dental especial o irrigadores bucales: Para quienes llevan ortodoncia, el uso de hilo dental con enhebrador o un irrigador bucal facilita la limpieza profunda entre los dientes.
Enjuague bucal adecuado: Utiliza un enjuague recomendado por tu dentista, preferiblemente uno con propiedades antisépticas que ayude a prevenir la inflamación de las encías.

Cómo el ortodoncista y el periodoncista trabajan juntos para proteger la salud bucal
El éxito de tu tratamiento de ortodoncia no depende solo de los brackets o alineadores, sino también de la colaboración entre tu ortodoncista y tu periodoncista. Ambos profesionales trabajan en equipo para:
Monitorear el estado de tus encías: Durante las visitas de ajuste, el ortodoncista revisa que no haya inflamación o sangrado excesivo y, si es necesario, te derivará al periodoncista.
Prevenir complicaciones: El periodoncista puede realizar limpiezas profundas o tratamientos específicos para controlar la inflamación mientras sigues con tu ortodoncia.
Asegurar un soporte estable: Este enfoque conjunto garantiza que el movimiento de tus dientes no comprometa la salud de tus encías y huesos.
Visita a tu dentista al menos cada tres meses mientras estés en tratamiento de ortodoncia. Estas citas no solo son importantes para ajustar los brackets o alineadores, sino también para realizar limpiezas profesionales y evaluar la salud de tus encías.
Consejo: Si notas sangrado, inflamación persistente o mal aliento, consulta de inmediato, ya que estos pueden ser signos de alerta de enfermedad periodontal.
La importancia de la salud periodontal después de la ortodoncia
Cuando termina un tratamiento de ortodoncia, tus dientes han cambiado de posición, pero tus encías y el hueso que los sostiene también han pasado por un proceso de adaptación. Durante el movimiento dental, las encías se «estiran» o se comprimen para ajustarse a la nueva posición de los dientes. Esto puede dejar áreas vulnerables si no se cuidan correctamente.
Sin una atención adecuada, es posible que aparezcan problemas como:
Inflamación residual: Si no se limpia bien la placa acumulada durante la ortodoncia, las encías pueden permanecer inflamadas.
Retracción gingival: Algunas encías pueden retraerse tras la ortodoncia, dejando expuestas las raíces de los dientes y aumentando el riesgo de sensibilidad dental.
Estabilidad dental comprometida: Aunque los dientes estén alineados, pueden moverse de nuevo si el soporte periodontal no es óptimo.
Tratamientos periodontales post-ortodoncia para prevenir complicaciones
Una vez que te quiten los brackets o termines con los alineadores, es fundamental que se evalúe el estado de tus encías y huesos. Tu dentista o periodoncista puede recomendarte algunos tratamientos para mantener tu salud bucal:
Limpieza profunda profesional: Para eliminar cualquier acumulación de placa o sarro que haya quedado en lugares difíciles de alcanzar durante la ortodoncia.
Tratamientos para encías retraídas: En casos más avanzados, se pueden realizar procedimientos como injertos gingivales para cubrir raíces expuestas y proteger los dientes.
Uso de retenedores: Los retenedores no solo mantienen los dientes alineados, sino que también permiten que las encías y el hueso se estabilicen en su nueva posición.
Cómo mantener una sonrisa sana y estable a largo plazo
El fin de la ortodoncia no significa el fin del cuidado bucal intensivo. Al contrario, es el momento de redoblar esfuerzos para garantizar que los resultados se mantengan. Aquí tienes algunos consejos prácticos:
Sigue con tu rutina de higiene: Aunque ya no tengas brackets, debes continuar cepillándote al menos dos veces al día, usando hilo dental y un enjuague bucal recomendado.
Visitas regulares al dentista: Programa revisiones periódicas cada seis meses para asegurarte de que todo esté en orden.
Cuidado con la alimentación: Limita el consumo de alimentos azucarados o pegajosos que puedan favorecer la acumulación de placa.
Consejo práctico: Usa siempre los retenedores que tu ortodoncista te recomiende. Aunque puedan parecer incómodos al principio, son una herramienta esencial para que tus dientes y encías se mantengan en armonía y los resultados de la ortodoncia duren toda la vida.
Conclusión
Un tratamiento de ortodoncia nunca debe iniciarse sin un estudio previo y cuidados adecuados de las encías, ya que la salud periodontal es la base que garantiza el éxito y la estabilidad de los resultados. Encías y huesos fuertes permiten que los dientes se muevan de manera segura, evitando complicaciones como inflamación, retracción o pérdida dental.
¡Confía en los especialistas de Clínica Dental Madrid Sur en Vallecas!
Si estás pensando en iniciar un tratamiento de ortodoncia, recuerda que la salud de tus encías es fundamental para garantizar resultados exitosos y duraderos. En Clínica Dental Madrid Sur, en el corazón de Vallecas, somos especialistas en periodoncia y ortodoncia, ofreciendo un enfoque integral para cuidar tu sonrisa desde la base.
Nuestro equipo te guiará en cada paso, asegurándose de que tus encías estén sanas antes de comenzar y acompañándote durante todo el proceso para que logres la sonrisa que siempre has deseado.
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¡Tu salud bucodental está en las mejores manos!
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Dra. Mercedes Fernández-Gianotti Pisani
Directora Médica de la Clínica Dental Madrid Sur
La Dra. Mercedes Fernández-Gianotti Pisani es la 2ª generación de la clínica dental Madrid Sur. Es licenciada en Odontología por la Universidad Europea de Madrid y se especializó a través del Máster en Periodoncia e Implantes de la Universidad Rey Juan Carlos.
Nº de colegiada: 28006836